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Actualmente Elysium atraviesa un maravilloso verano, predominando los días soleados, aunque también de vez en cuando es posible toparse con días donde las lluvias no paran de caer sobre la isla. Las temperaturas varían bastante, yendo de los 33° como máximo hasta los 18° como mínimo. Esta temporada es ideal para paseos en la playa, fiestas al aire libre, todo tipo de actividades recreativas en las que puedas disfrutar de un hermoso sol y cielo despejado en su mayoría.
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• Il vero amore non muore mai.
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por Invitado Jue Jul 26, 2018 10:07 pm
Anastasia Giovanna Romagnoli A: 26 años || R: 1300+ años Bisexual Fantasma Tumultus Italiana Desocupada | Personalidad Dos caras de una misma moneda. Perfecta manera de describir a Giovanna; una mujer que a primera vista y con todos en general se comporta gentil, amable y servicial. Siempre con buena cara y paciente como pocos, siempre con una sonrisa plasmada en el rostro y especialmente dispuesta a unirse a todo lo que le propongan siempre y cuando le suene de su agrado. Es de esas personas que tiene una forma muy suave de hablar, una voz melodiosa ... casi aterciopelada se podría catalogar, que sale de su boca con una gentileza absoluta. Quizás su mayor atractivo sea ese, su voz tan suave, como una canción de cuna constante que le da una apariencia delicada, adorable. Es de esas mujeres que está dispuesta a prestar su hombro para quien lo necesite, buena dando consejos y especialmente fantástica brindando apoyo aunque a veces parezca que no es capaz de aguantar los trotes. Evidentemente esto es con la gente que no la conocen demasiado, o que simplemente no tiene necesidad de mostrar su lado más maduro. Porque a fin de cuentas todas estas actitudes, casi que pareciendo mosquita muerta es tan solo para dar la impresión de que no es capaz de hacer cosas por su cuenta. Obvio, que esto se aleja totalmente de la realidad; claro que es una mujer gentil, de buen corazón y sincera. Pero también es mordaz, decidida, ambiciosa. Pero esta forma de ser suya solo la conoce una sola persona, el único amor de su vida y aquel hombre que ha conquistado su corazón a base de sudor y lágrimas. Ese hombre al que en un comienzo odió con todo su ser, y ahora ama con toda su alma errante. Directa, una vez dice algo esto se tiene que hacer a toda costa, generalmente mostrando ser una mujer independiente que sabe cuidarse por si misma, especialmente de Pietro. De esas mujeres firmes, a las cuales no debes llevarles la contraria si no quieres terminar mínimo con una bofetada bien dada en una de tus mejillas. Solía ser quien asistiera al joven Balzaretti en todo, no como su mano derecha si no como su apoyo, aquella que enfriaba su cabeza cuando la situación superaba al italiano; su luz cuando no podía pensar con claridad. Apasionada, siendo capaz de elevar su voz con vehemencia si era necesario para que las cosas se hicieran tal y como Pietro las quería. En tiempos de flaqueza es cuando ella más resaltaba, estando todo el tiempo para él, incluso en las peores situaciones. Nunca se iba de su lado, no como una maldita lapa, una sanguijuela, si no como aquel pilar que de a ratos podría faltarle al contrario. Dispuesta a todo con tal de velar por su bienestar. Claro, en un inicio las cosas fueron difíciles y lo único que quería era verle caer, pero gradualmente se fue ganando su corazón a base de actitudes que encantaron a la dragona y le dejaron en claro que Pietro solo era un hombre afectado por su pasado, por la culpa que acarreaba sobre sus hombros. Pero un hombre que obtenía lo que quería cuando lo quería, sin importar las consecuencias. Una madre cariñosa, un amor de persona con la mayoría de las personas, pero sin lugar a dudas una mujer de temer cuando la situación se lo impone. Un hueso duro de roer, que no temería darle una bofetada a Pietro u gritarle en la cara si se lo merecía; su mujer. Historia Como tantos otros matrimonios, el de Giovanna no fue la excepción; de familia italiana si bien no muy importante sí que poseían cierto renombre especialmente en la industria de exportación de materia prima del país en aquellos tiempos. Los Romagnoli tenían influencias por todos lados, pero nunca tanto como la familia Balzaretti. Estaba más que claro que una unión entre ambas familias rendiría frutos a futuro; ofrecieron la mano de su primera hija mujer como tributo por así decirlo para que las relaciones familiares florecieran. Y así fue, ambas familias tomaron el acuerdo, pero fue poco tiempo después que dicho acuerdo ... simplemente se desvaneció en la miseria de lo que sucedió con los Balzaretti. Después de lo ocurrido con los Vólkov, y habiendo tenido que irse cuanto antes, los Romagnoli quedaron en el medio como nada más que un desafortunado accidente abandonado. Pronto aquella influencia empezó a desvanecerse, y la familia de Giovanna quedó en el olvido, la pobreza les alcanzó poco tiempo después, a medida que la presencia de las deidades se hacía más y más presente. Pasaron los años, y cuando todo parecía perdido, cuando no quedaba más que pan y agua, algunos chelines de lo que alguna vez fue una enorme riqueza, recién allí... recibieron nuevas noticias de la familia Balzaretti. Pero esta vez, no fue por parte de un mensajero, un tercero... dicho mensaje fue enviado por el mismo Pietro. Ahora Giovanna una simple adolescente, y él ya parecieron un joven adulto vino a reclamar la mano de aquella mujer que le habían prometido. Como si fuese una obligación, Giovanna tuvo que acceder, repudiando por completo no solo a su familia si no también a este hombre que la tomaba como si fuese una especie de objeto. Por más que recibió los mejores tratos por parte de los Balzaretti, y cuando cumplió la mayoría de edad se tuvo que casar con Pietro, esta no mostraba indicios de siquiera tener respeto por aquel hombre que ahora se había convertido en su esposo. Las cosas no iban bien para ninguno de los dos, y aunque Giovanna se mostrara siempre tan infantil y amable con los demás, con Pietro era diferente... se transformaba en una mujer ruda, y si bien no mal hablada, sabía cómo hacerle frente a todo momento. Y en vez de recibir improperios por parte del dragón, recibía dichas discusiones con una gentil sonrisa, como si hasta le agradara la forma en la que aquella mujer lo trataba; cuanto más avanzaba la relación, más se iba dando cuenta ella que la errada era ella, no los demás. Pietro nunca intentó abusar de ella, quizás algún que otro avance habrá hecho y ella lo recibía con rechazo ... pero nada más. La invitaba a cenas, le hacía regalos que dejaba especialmente sobre su cama sin interrumpir la privacidad de la mujer. Claro, que esto lentamente fue ablandando el duro corazón de la dragona, hasta que un santo día ... ella misma decidió tener una seria y larga charla con el mayor, el cual le recibió de brazos abiertos. Esa charla... desembocó en quien meses más tarde llamarían Stella. Fruto de un cariño que nació entre los dos tan lento como el cuidado de una rosa, delicadamente acercándose a ella hasta que cuando quiso darse cuenta ya era muy tarde para echarse atrás. Fue producto de ese amor que tarde o temprano, todo cambiaría. Giovanna sabía de su rivalidad con aquel ruso, con ese soviético, y es que en su tontería creyó que yendo a hablar con él, las cosas quedarían saldadas... pero nada la preparó para lo que la recibió. Lo que le hicieron ... no se podría repetir, las clases de torturas que el rubio la hizo sufrir serían suficientes como para corromper la mente de cualquier persona; cualquiera menos ella. Abusó de su cuerpo infinidad de veces, incluso sus subordinados hicieron lo que quisieron con ella. Pero nunca se dio por vencida. Esperó por Pietro, esperó tanto tiempo por él, que cuando llegó ... ya era muy tarde. Su cuerpo, debilitado por los abortos a los que la forzaron. Recibido con un tiro en el estómago, en brazos de su amado Pietro, susurró con su último aliento. "Il vero amore non muore mai, il mio cuore è sempre per te..." Más su muerte no fue nada más que un mero suspiro. Ya que en vez de ser recibida por los gentiles brazos del inframundo, su espíritu vagó tantos años sin rumbo. Sin memorias de lo que realmente debía hacer allí ... siempre al lado de un hombre que ahora no reconocía. Le daba tanta pena lo que aquel ser tenía que sufrir, lo que un hombre soviético le hizo, y a su aparente hija. ¿Por qué entonces a ella, como un espíritu errante, le dolía también? Lo sentía incluso en su gélido pecho... estuvo allí junto a él incluso cuando fueron marcados por aquel cruel hombre ruso. Cuando la muerte les alcanzó y volvieron a la vida poco tiempo después ... en un mundo donde la presencia de las deidades era incluso más fuerte que antes. Y fue cuando el hombre repitió esas palabras... esas que ella le dijo antes de morir, que todo volvió a su cabeza. Dolía, más de lo que quiso ser capaz de aguantar, no poder estar a su lado y decirle que estaba bien. ¿Bien? ¡Estaba muerta! ... Pero a su lado, siempre a su lado. Porque el verdadero amor nunca muere. Físico
Datos extra • Antes de morir, su raza era Dragón. • Generalmente le llaman Ana o Anastasia, a la única persona que le permite llamarle "Gio" es a Pietro. • Es capaz de volverse tangible, pero nada más una hora cada un mes. • Murió cuando su hija era pequeña, aparentaba más o menos unos 26 años de edad. • Desde su muerte, su espíritu nunca se ha separado de Pietro, aunque hasta ahora este nunca se ha dado cuenta; o eso cree. • Disfruta muchísimo la pasta, especialmente el spaghetti. • Sabe cocinar muy bien, aprendió de su abuela cuando era joven. • Le encanta beber café. • Tiene un gusto culposo que es fumar cigarros, aunque lo hacía muy de vez en cuando. • Le encantaría volver a la vida pero sabe perfectamente que no puede. • Su mayor deseo es que Pietro llegue a estar en paz de una vez consigo mismo, y especialmente deje ese rencor, ese deseo de venganza que sigue teniendo. Chiyo — Ane Naru Mono |
Invitado
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por Rubrum Ignis Jue Jul 26, 2018 11:58 pm
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