✧ Razas

A todos les gusta sentirse abrazados con la calidez divina de la luz. Luego de siglos proclamando como la eternidad siempre será clara y hermosa, abrazado todo por el manto de lo más lindo sin necesidad de que cualquier otro elemento tangible o dañino se entrometa en dichos deseos de tranquilidad. Casi subestimando a las creaciones de un Dios que da vida a las cosas más insignificantes y lo hacer todo a la perfección, algo tan perfecto a veces es demasiado bueno para ser verdad, pero esto no evita que se crea en un confort luego de pasar días en estrés. La bondad y buenos sentimientos de cada persona puede provocar milagros inexplicables, como si cada uno fuera su propio Dios, al menos para una buena acción. De ahí nacen especímenes caracterizados por su calidez tangible y brillante apariencia, quienes se originan de esa fe ciega por las buenas cosas y experiencias agradables. Completamente diferentes a los que se ven en el fuego. Más su brillo es natural y magnifico, son tan sensibles a las buenas intenciones que es muy sencillo heredar estar características para asegurar una descendencia de bien.

Son extremamente sensibles a su contraparte, la energía es crucial para ellos, sea artificial o natural, el simple hecho de ser expuestos a una penumbra afecta su integridad física y si no se tiene cuidado podrían desaparecer por completo. En relación a lo anterior, las buenas vibras también pueden ser una fuente de alimento, el constante estrés o malicia pueden provocar un daño en ellos, no lo suficiente para acabar con su existencia pero sí para provocar enfermedades sobre ellos. Quizás son el ser más delicado que se puede encontrar en la naturaleza. Frágiles en ciertas circunstancias, poderosos en otras tantas, los ángeles no son seres a los que se les pueda subestimar por su aparente inocencia y buena voluntad. De concepción distinta dependiendo de la religión de la que provengan, son los ángeles quienes ejercen una mayor protección sobre los más débiles.

Mejor conocidas como celtas, las ninfas y silfos solían constituir una civilización divina cuyos conocimientos del universo superan a las del hombre, y su presencia se manifiesta a través del fuego, la tierra, el agua y el aire. Éstos seres han sido alabados por su gran belleza, además también de sus habilidades en las artes bélicas  y de la hechicería, relacionados en su mayor parte con los elfos. Se les ha ligado con el arte de la adivinación o la capacidad de influenciar la historia de los propios humanos.

Tienen en común la soberanía de los ríos, lagos, mares y bosques, capaces de transformarse, por ejemplo, en riachuelos para escapar de sus cazadores. Éstos seres suelen adoptar también el papel de guardianes o bien convertirse en la proyección de virtudes o defectos humanos. Fueron reducidas a casi nada, convirtiéndose en una de las razas que, vistas como esclavos, representan una adquisición invaluable al ser consideradas inclusive deidades. Es común en éstos seres también encontrar a una persona con la que formar una familia, mas no se les busca con la intención de capturarle, simplemente para ofrecer un pacto. Hay que ser cuidadosos con éste tipo de seres, pues si dicho pacto llegase a romperse, aquella persona involucrada podría recibir una terrible maldición de parte del hada que se ofreció en primer lugar como su acompañante, o bien ser castigado con una muerte lenta y sufrimiento incomparable.

Las sirenas y tritones, también considerados ninfas, son seres de gran belleza y con una preciosa voz. Se menciona que su origen proviene de hace muchos años donde a causa de un poder desconocido los humanos fueron transformados en peces. Su verdadero origen es un misterio, sin embargo no es algo de real importancia. Como se ha dicho, se caracterizan por su belleza sin igual, específicamente en las sirenas como también su voz cautivante que en tiempos pasados servía para llamar la atención de navegantes que se paseaban por el mar. Su principal y más destacable característica es su cuerpo; un torso de humano y cola de pez. Normalmente viven en el mar u océanos, nadando a sus anchas por el mundo, encantando a personas con sus melodías y engatusando a los hombres para tenerlos a su merced. No son malas criaturas, al menos no conscientemente, es sólo su naturaleza.

Sus machos son llamados sirenos o tritones, poseyendo las mismas características físicas que las sirenas salvo que con aspectos masculinos, claramente. Los hombres no se basan demasiado en el canto y demás, mas bien su modo de llamar la atención es mediante muestras de fuerza en la mayoría de los casos.

Como seres marinos que son, no pueden estar demasiado tiempo alejados del agua pero no por ello le es imposible. Al salir, su cola se transforma en piernas sin problema, volviendo a sus forma original una vez tocan nuevamente el agua. Sin embargo, son propensos a resecarse si están demasiado tiempo afuera de la mencionada y eso causa dolorosas grietas sobre su piel.

Cuando un alma no encuentra el descanso que tanto anhela, es lo más normal que vague sin un destino fijo, atrapado en una constante espiral de sufrimiento hasta que consiga cumplir con aquello que dejó pendiente cuando vivía. Los fantasmas son aquellas almas que no han conseguido llegar a su destino final, esencias que han quedado atrapadas en el mundo terrenal hasta que puedan conseguir aquello que no les permite el descanso eterno. Sus cuerpos no son precisamente palpables o visibles para cualquiera, y vagan sin tener en realidad un lugar al que pertenecer, buscando por todos lados algo que les ayude a completar el objetivo que en primer lugar les mantiene encadenados a este plano astral. Son capaces de materializarse y ser palpables por un corto período de tiempo, incluso lucir como personas normales, sin ningún tipo de complicaciones; sin embargo, no pueden mantener ésta forma por mucho al debilitarse de manera considerable. Tienen la capacidad de poseer otros cuerpos también por una cantidad limitada de tiempo, la suficiente para comunicarse cuando no tienen la energía suficiente para materializarse. Pueden ser tanto espíritus buenos como espíritus crueles, es imposible saber a ciencia cierta cuáles son sus verdaderas intenciones.  

NOTA: Esta raza es la única, además de los inmortales, que puede entrar y salir del Inframundo a voluntad sin necesidad de tener roles con Hades o Persephone.

La divinidad es un regalo y como ello se atesora de la mejor manera, sin embargo, no todos toman ese dichoso regalo para utilizarlo para su propósito, algunos moldean sus necesidades a sus habilidades para así llevarlas al extremo del poder y la avaricia. Aquellos que no respetan el regalo divino y la responsabilidad que este acarrea son desterrados de las tierras celestiales donde pierden el grandioso don de la luz, pero no todo está perdido porque sus habilidades no son del todo arrancadas de sus manos sino más bien moldeadas a sus nueva forma para así satisfacer sus nuevas necesidades pecaminosas. Usualmente son confundidos con los demonios por su naturaleza maligna y la verdad no están muy lejos de serlo pero ellos no nacieron en las sombras ya que algunas vez fueron puros como debieron mantenerse, pero ya no más y no por ello quiera decir que sean amigos o confabulen con otros seres de las sombras, son altamente inteligentes y astutos cuando se trata de manipular a los demás para obtener lo que desean con el fin de seguir con sus ideales.

El costo de sus pecados no solo arranca de ellos su preciada pureza sino también todos los beneficios pasivos que esta trae volviendo su nueva naturaleza completamente vulnerable a todo lo que eran anteriormente, obligados a permanecer sombras ya que la luz se convierte en su peor enemigo, sin embargo, el único consuelo es que los aparatos divinos no son sus peores enemigos sino que pueden causar un daño menor pero sigue siendo un daño y si no se tiene cuidado podría llegar mucho más allá que un rasguño o quemadura superficial, afortunadamente sus heridas pueden sanar con rapidez pero si no se es cuidadoso podría llevar a uno permanente y hasta la muerte.

Todo elfo puede llegar a convertirse en un Drow, más no al revés. Si bien los elfos son apegados a la naturaleza y cuidan de esta, los Drow han llegado a tomar un aprecio mucho más enriquecido a la magia oscura y prohibida. Muchos de estos incluso optando por vivir bajo tierra, he ahí la razón por la cual sus pieles generalmente son mucho más oscuras de lo normal, y sus cabellos comúnmente son de un blanco muy claro. Dichos seres como se ha mencionado antes, fueron elfos comunes y corrientes que a lo largo de sus longevas vidas han conocido y utilizado magia oscura, sus almas y cuerpos siendo corrompidos poco a poco hasta llegar a ser prácticamente considerados caídos entre los de su raza. Los Drow normalmente son perseguidos y repudiados por los elfos comunes, más que nada por la forma en la que se han denigrado a si mismos, o al menos esto opinan los elfos que los cazan y persiguen.

La tan ansiada inteligencia artificial. Estos seres fueron creados años atrás por científicos que creían fervientemente que una máquina podría hacer las mismas actividades que un ser humano, pensar como uno, pero superándole en niveles bastante más elevados. Son seres cuya creación se basa principalmente en logaritmos que les impiden tener pensamientos egoístas, hechos principalmente para obedecer a quienes se llamen sus "amos"; no obstante, desde hace algún tiempo se ha sabido de varias de éstas máquinas que desarrollaron un criterio propio, capaces de tomar decisiones, de oponerse incluso a órdenes de sus creadores. Pese a haber sido creados para obedecer, y ser vistos como máquinas, éstos seres se consideran a sí mismos "vivos", como cualquier otra criatura que camine en la tierra. Lucen como cualquier otra persona lo haría, no hay mucha diferencia, salvo que un androide puede obviar necesidades básicas como dormir o comer, permitiéndoles esto actuar con mayor eficiencia por un período mayor de tiempo. Un androide puede fungir como un ser humano común y corriente, pues su cuerpo luce exactamente como el de uno. Éstos seres, no obstante, no son capaces de reproducirse, pues siguen siendo máquinas al fin y al cabo. Por supuesto, no hay manera en que un androide sea creado a partir de otra raza, pues éstos seres son programados desde cero, desde el momento de su diseño.

Difíciles de describir, pues son objetos animados por medios arcanos y he allí el porqué de su estrecha relación con los brujos. Pero aun siendo objetos animados, dan la sensación de ser humanos por su aspecto y comportamiento. Son seres difíciles también de encontrar pues pertenecen a una especie que no se localiza en estado salvaje, sino más bien nacen siempre en cautiverio, ligados de una manera muy estrecha a su creador.

La creación de un doll inicia con la creación del cuerpo, que puede ser realizada en masa por compañías o artesanalmente, los materiales varían, desde frágiles hasta irrompibles; sus cuerpos pueden ser creados a base de arcilla, de barro, o incluso materiales tan sofisticados que pueden hacerlos lucir y sentirse como si hubiesen nacido de manera natural, pues pueden llegar a estar hechos de tejido biológico. Es raro ver dos doll con los mismos rasgos físicos, una anomalía que puede darse en caso de que las almas utilizadas por sus creadores hayan pertenecido a hermanos, y que por azares del destino decidieron permanecer juntos incluso en la otra vida. Sin embargo, dejando de lado esta pequeña excepción, se tiende a hacerlas únicas en su tipo.  Después de creados sus cuerpos, con la ayuda de brujos que obtienen fragmentos de alma que cada uno a su particular manera lo liga al cuerpo para darle “vida”.

Es así que adquieren movimiento, pensamiento y personalidad propios, pues derivan de un espíritu de lo que fue un “alguien” real. Sus formas son tan variadas como posibles mezclas de humanos y otras razas existen y aún más allá. Son capaces de tener sentimientos, algunos más sofisticados con ayuda de biotecnología parecen tener sensibilidad física y en estos casos es recomendables hacerlos muy resistentes. Empero, además de ganar o sufrir sensaciones tópicas, no experimentan hambre o cansancio. La vida de un doll se encuentra atada a un catalizador o artefacto al que el alma se haya aferrado para mantenerse en ese mismo plano astral; si éste artefacto es destruido, el doll volverá a ser sólo un cascarón vacío, y el alma volverá a su plano inicial.

Bajo muchos otros nombres, brujas, alquimistas y hasta seres malditos, humanos quienes nacieron con la terrible suerte de ser sensibles a la magia, se puede apreciar en ellos un gran balance entre dos mundos puesto que son capaces de hacer cosas que los demás no pueden hacer, algunos usan este pequeño don para el bien y otros para satisfacer sus necesidades más avaras. No existe un estándar para ellos más que ser humanos mágicos, como pueden desarrollarla varía según cada uno de ellos, unos por pociones otros son más tradicionales y utilizan las viejas varitas, otros no necesitan nada de ello para poder hacer su magia. Lo que de verdad es constante es el hecho de que todos son sensibles a objetos mágicos, también se pueden ver realizando diferente tipo de experimentos entre las demás razas para poder mejorar la suya, no se es completamente seguro de cuan es que su especie existe pero no tienen una fama exactamente buena independientemente de su verdadera naturaleza. Son bastante retraídos de sus habilidades en público y se consideran como rivales naturales de todos los demás seres lógicos puesto que son puramente mágicos.

Los que utilizan las cosas para bien no son muy diferentes a las personas normales, quizás el hecho de que pueden desarrollar habilidades para vivir un poco más que otros o ser inmunes a algunas enfermedades podrían ser las únicas variantes evidentes entre ellos. Por otro lado los más siniestros sacrifican esa pizca de humanidad para dar cabida a cosas mucho más terribles, sacrificando la vida de inocentes para poder satisfacer ello, sin embargo esto les obliga a permanecer en las sombras, la mínima pizca de divinidad o bondad sería terrible para su cuerpo, son mucho más expuestos al público y su apariencia puede cambiar a una más grotesca por lo que se ven obligados a esconderse utilizando más energía de la que realmente desean, acortando su vida con ello.

Criaturas de la naturaleza, unidos con un vínculo tan estrecho que nacen de esta, principalmente de los elementos que la conforma y existen de manera inédita en ella, ésta concentración de magia hace que seres sean capaces de nacer de ella hasta materializarla en un ser con apariencia humana, al menos hasta cierto punto, algunos poseen ciertos detalles que les pueden delatar sobre el elemento que predomina en ellos, así sean pequeños aspectos como cabello, ojos y personalidad que sean capaces de delatar su naturaleza. Lo predominante es fuego, aire, viento y tierra, pero puede haber otras criaturas de elementos combinados, como sería hielo o lava lo cual es la mezcla de dos principales. Son altamente sensibles al elemento al que son débiles lo cual es lo contrario a ellos, como lo sería el fuego con el agua. Se menciona que ellos no son capaces de morir persé, sino que al terminar su energía vital terminan volviendo a su estado elemental y por ende a la naturaleza misma con la posibilidad de volver como un ser nuevo desde cero.

Los dragones son reptiles alados pertenecientes a una de las razas más antiguas de la mitología. Ostentando un tamaño colosal con su enorme figura que puede rondar a los treinta metros en su adultez y un porte imponente donde el color de sus escamas los clasifican entre ellos. Normalmente son una raza que es sabia, aprendiendo al transcurso de su longeva vida donde aprenden a dominar un elemento madre como el fuego, el agua o similares aunque, claramente, no es igual en todo los casos. Prefieren la soledad antes de la compañía de otros seres u otros de su especie, volviéndose un poco ariscos en su mayoría aunque no por ello encerrándose solamente en sí mismos.

Territoriales y ciertamente posesivos con lo suyo, son apreciadores de riquezas y las cuidan con recelo. Para un dragón su joya más valiosa son sus escamas y por ello se vuelven feroces a la hora de cuidarlas. Como cualquier otra raza, se ha visto obligada a moldearse al mundo y seguir sus reglas bajo una apariencia más humana. Sin embargo, siempre estará presente cierta dureza sobre su piel y aspereza pero nada demasiado relevante.

En este apartado se encuentran todas aquellas criaturas que por su apariencia física o por ser propensos a vivir en un entorno totalmente salvaje, no entran en ninguna otra categoría. Criaturas como unicornios o pegasos, inclusive seres como Cerbero o Minotauro pueden entrar con extrema facilidad en esta raza. Es posible también incluir en esta categoría a las quimeras cuya mejor definición es llamarle híbridos pues, de cierto modo lo son. Según la mitología griega, se menciona que su apariencia podía variar desde tener un cuerpo de cabra, cola de serpiente o dragón y cabeza de león, inclusive hay relatos donde poseen tres cabezas: una de león, una de macho cabrío que surge del lomo y una cola con cabeza de serpiente o dragón. Fuese cualquiera de esas descripciones, siempre estaba presente la composición con demás animales.

Las quimeras poseen su forma natural, es decir, aquella bestialidad que las conforma a mayor o menor medida. Pueden poseer tres animales que la conformen como también ser más o menos pues, al fin y al cabo, la finalidad será la misma. En la actualidad camuflan su verdadera forma bajo un físico falso muy parecido a un simple humano buscando pasar desapercibidos, pocos son aquellos que dejan ver la realidad que se oculta bajo su nombre aunque, claramente, en algún momento la verdad salga a la luz.

Los primeros habitantes de la tierra y quienes hasta hace muy poco se llamaban los gobernantes supremos de todo el planeta. Quizás no este muy lejos de la realidad, después de todo así se creía desde el inicio de los tiempos. Se disputa mucho su origen, desde que fueron creados por una entidad divina, hay otros que mencionan la evolución lógica desde los principios de la tierra y finalmente los que narran historia de seres sin rumbo por el universo que terminaron en un lugar desolado y habitable para su desarrollo estable. Entre esta especie se discuten todos estos temas, nos da una idea de como puede llegar a ser de impredecible la naturaleza de cada uno de ellos. Otras especies les denominan la raza más antigua y prehistórica, a rasgos de evolución están por encima de todos en la cadena alimenticia y seguirían ahí de no ser por su curiosidad.

No poseen alguna particularidad especial sobre sus cuerpos, su cuerpo sirve de base para las demás razas permitan adaptarse a la vida "normal". Nada más se trata de evolución. Su estructura varía y se adapta lentamente a su entorno. Cada individuo posee su única estructura, personalidad y cualidades. Son quienes constituyeron las primeras sociedades y terminaron por destruirla junto a su ambición de querer más poder y descubrir más allá de sus propios límites. Así como se mencionó anteriormente, el punto más débil psicológicamente hablando es la curiosidad del ser humano. Además, son el punto medio para todas las cosas en comparación de otras especies que terminaron por descubrir accidentalmente. Sin embargo, no todo está perdido. Tienden a ser la mayoría de las veces pacíficos, algunos ponen sus intereses sobre otras personas, otros son caritativos.

La naturaleza regala muchas cosas y con ella la evolución de algunas especies para mejor, dentro de la más resaltante se encuentran estos, una mixtura entre dos razas que parecen completamente ajenas se presenta dentro de muchas personas, esto es la humana que sería bastante predominante en ellos y como segunda esta la animal, en su mayoría mamíferos pero no siendo tan fuerte como la primera, su característica más resaltante se encuentra en su exterior es que parecen ser humanos normales, pero poseen rasgos o características animales del que sea su animal interior, pueden notarse orejas, colas y hasta pequeños rasgos faciales como los ojos o marcas alusivas a estos. No existe específicamente una especie que sea más vista entre ellos porque se han notado que muchos son variados como rasgos de perros, gatos, zorros, osos, entre otros animales, aunque la mayoría son de naturaleza pacífica.

Su mayor don es que poseen algunas habilidades de sus animales en el caso de osos o tigres poseerían una gran fuerza, de ser perros o zorros entonces tendrían un gran olfato u oído, sin embargo, su tiempo de vida es similar al de los humanos. Son seres sensibles a la magia también ya que fueron descubiertos de esa manera, pueden ver algunas cosas que los humanos normal no pueden ver. Entre  sus mayores debilidades, no son diferentes a los animales o humanos, no son indestructibles y algunos están sujetos a enfermedades extrañas que podría acarrear la segunda raza con la que comparten, con la habilidad que traen también se dan muchas responsabilidades después de todo.

Seres divinos, pertenecientes a diversos panteones. Muchos de estos con un poderío envidiable, respetable o incluso temible. Deidades que desafían las leyes de toda la lógica con sus habilidades, siendo capaces de hacer hasta las tareas más difíciles como si fuese algo mundano. Gran mayoría del tiempo guiados por un ego inquebrantable, otras veces por una ideología que se han planteado a lo largo de sus longevas, por no decir infinitas vidas. Omnipotentes, son capaces de todo lo que cualquier ser humano podría tan solo imaginarse, o más allá de lo que sus imaginaciones podrían procesar; nunca podrían llegar a entenderlo del todo. Conocidos por sus proezas, fueran buenas o malas en el pasado, venerados e idolatrados, son miles... no, millones de rezos los que llegan a los oídos de los Dioses, y si bien recibidos, no siempre escuchados. Independiente de su procedencia, del panteón al que pertenezcan, siempre destacan en una cosa; son virtualmente inmortales.

NOTA: Esta raza sólo está reservada para los personajes canon.