Nine Beasts | { Confirmación Elite }

Diez años habían pasado desde la última vez que la sangre había bañado de manera oficial, las tierras de Daichi. Pero, como todos conocen, la desesperación y las ansias de poder, siempre habían sido el mayor enemigo del hombre.

El deseo de poder provoco que Kuro Yotsuki, el Yondaime Raikage, decidiese anteponer su gran poder de conquista por las extensiones del país del fuego, consiguiendo de este modo no solo amedrentar a Ryota Senju si no también arrebatar de sus manos lo único que su linaje había mantenido con orgullo y junto a ello, lo había hecho brillar, la aldea oculta de la hoja.

Tras la irrupción de Masao Namikaze en los terrenos del país y como silenciosamente sus shinobis habían ido avanzando desde la frontera al interior del país, gracias a sus grandes capacidades y con ayuda de su mentor, este Jonin del País del Rayo finalmente se vio coronado como el actual Yondaime Hokage. Algo que nunca, hubo modo de combatir.

El pánico surco cada centímetro de Daichi, aquello significaba una ruptura del tratado de paz, una traición que tanto el País del Agua como el País de la Luna, no estaban dispuestos a aceptar. La guerra de este modo se vio declarada, enfrentando a los resignados shinobis que restaban del País del Fuego junto con los del País del Rayo contra aquellas islas que comenzarían a alzar sus defensas y junto a ello buscar modos con los cuales enfrentar cualquier tipo de futuro desastre, algo que nunca se convirtió en un problema aunque siempre quedarían las intrigas sobre el por qué Sunagakure no Sato, había vuelto a hacer acto de presencia de aquella manera en medio de algo tan simple como unos exámenes chunin, exámenes donde la muerte, se convirtió en la principal protagonista.

La guerra declarada ahora comenzaría un mundo de sangre, desesperación y con ello, un nuevo mundo que pocos podrían llegar a soportar.